Cosas importantes que debemos recordar para envejecer saludablemente

[avatar user=”doller” size=”thumbnail” align=”left” link=”https://somoscc.wpengine.com/who-we-are/denisse-oller”]por Denisse Oller[/avatar]

Para nadie es un secreto que a medida que pasan los años, necesitamos prestar más atención a nuestra salud. Para muchas personas, las visitas al consultorio se hacen más frecuentes, mientras que las complicaciones médicas se vuelven más comunes. Esto significa que es esencial tener una actitud proactiva y desarrollar hábitos que mejoren nuestro bienestar aun con el paso del tiempo.

He aquí algunos consejos útiles para mantener la salud con el paso de los años:

1. Mantente hidratada

Aun cuanto pareciera sencillo, la hidratación es en realidad un asunto serio entre las personas mayores de edad. De acuerdo a la Clínica Cleveland, la deshidratación es una causa común de hospitalización entre ese sector poblacional. Esto se debe a que a medida que el cuerpo envejece, retiene menos agua en comparación con los años de la juventud, lo cual hace que prestar atención a la hidratación sea un aspecto clave para mantenernos sanos.

El agua juega un rol fundamental para regular la temperatura corporal, ayudar a la circulación de la sangre y para lubricar las articulaciones, todo lo cual le permite a tu cuerpo funcionar de manera óptima. Las personas que no se hidratan apropiadamente pueden llegar a experimentar problemas como mareos, caminar con dificultad, confusión u otros síntomas que pueden desembocar en una visita inesperada al consultorio o al hospital. Para evitarlo, intenta beber al menos ocho vasos de agua al día y bebe jugos altos en azúcar de manera esporádica y moderada.

2. Nunca subestimes una dieta saludable

En este blog, solemos escribir mucho sobre la importancia de comer bien y acerca de recetas saludables, pues apegarse a una dieta saludable es crucial para poder mantener bajo control enfermedades como la diabetes y las afecciones cardiacas, pero comer alimentos nutritivos no solo es importante para las personas que padecen enfermedades crónicas. A medida que envejecemos, nuestro metabolismo se hace más lento y, por lo tanto, no deberíamos consumir tantas calorías como cuando éramos más jóvenes. Esto quiere decir que es más importante que nunca asegurarnos de que los alimentos que consumimos satisfagan nuestras necesidades nutricionales.

Comer más frutas, verduras y granos integrales te asegura que le estás dando a tu cuerpo las vitaminas y los nutrientes que le permiten funcionar bien. Lee aquí sobre la dieta DASH.

3. Mantente activa

Para las personas de todas las edades, la actividad física desempeña un papel central en el objetivo de mantener la salud. Aunque a las personas mayores se les puede dificultar mantenerse activas, existen numerosas evidencias que demuestran que así pueden mejorar su bienestar de varias formas.

El ejercicio físico ayuda a mejorar la fortaleza y movilidad del cuerpo, así como a mantenerlo en forma y facilitar su desplazamiento para realizar los quehaceres cotidianos. La actividad física también es benéfica para la salud mental, en virtud de que libera endorfinas y aumenta la circulación sanguínea en el cerebro, lo cual ayuda a mitigar el declive mental. Por último, hay evidencias suficientes que demuestran que el ejercicio físico ayuda al cuerpo a recuperarse más rápido después de intervenciones quirúrgicas o heridas y lesiones.

4. Mantente resuelta y decidida

Aun cuando prevenir y mitigar las enfermedades es crucial para las personas mayores, esto es apenas la mitad de la lucha. Mantener la salud mental es otro aspecto vital del envejecimiento saludable. Con el paso de los años, las personas mayores pueden llegar a tener sentimientos de depresión, soledad y desinterés por cosas que antes les entusiasmaban, sobre todo por los profundos cambios de vida que acompañan al envejecimiento.

Para ayudar a prevenir la sensación leve de depresión y evitar la soledad, mantén una actitud proactiva y busca oportunidades para socializar o sentirte útil. Organiza un club de naipes, inscríbete a clases de ejercicio u ofrece tu ayuda como voluntaria en alguna asociación de beneficencia pública. Aprovecha todas las oportunidades para estar en contacto con tu comunidad y con otras personas, pues así ayudarás a mantener tu bienestar mental. Si crees que estás experimentando problemas de salud mental más graves, no dudes en consultar a tu médico para evaluar cuál tratamiento sería más conveniente para ti.

Fuentes consultadas:

https://www.ncoa.org/economic-security/benefits/food-and-nutrition/senior-nutrition/

https://www.who.int/ageing/healthy-ageing/en/

https://www.umh.org/assisted-independent-living-blog/bid/337684/the-importance-of-keeping-your-aging-senior-active

https://www.nia.nih.gov/health/depression-and-older-adults

https://health.clevelandclinic.org/drink-up-dehydration-is-an-often-overlooked-health-risk-for-seniors/