Para quienes hemos intentado perder peso, sabemos que no basta sólo con desearlo.
Adelgazar no es nada más cuestión de ponerse a dieta o de probar la última dieta reductiva para obtener resultados rápidos. Adelgazar significa comprometerte y tener en mente un plan que puedas seguir efectivamente. Seamos sinceras: la mayoría de nosotras (si no es que todas) queremos ver resultados inmediatos en muy poco tiempo. Sin embargo, el estudio CDC ha revelado que las personas que adelgazan gradual y constantemente tienen más probabilidades de tener éxito en su objetivo de perder peso. Esto significa que la mejor manera de obtener resultados a largo plazo es cambiando nuestro estilo de vida, para lo cual se requiere hacer ejercicio regularmente y tomar decisiones más saludables todos los días.
A continuación, te hacemos algunas sugerencias para ayudarte a empezar.
Paso 1: comprometerte. Comienza por comprometerte contigo misma y escribe un contrato de tus objetivos, incluyendo la cantidad de peso que quieres adelgazar, la fecha en que te gustaría perder ese peso, los cambios dietéticos que harás para tener hábitos alimenticios más sanos, y un plan para ejercitarte regularmente.
Paso 2: conoce la posición donde te hayas actualmente. Consulta a tu médico, pues él o ella puede evaluar tu estatura y peso, así como explorar los riesgos que puedes tener en relación con tu peso y también para monitorear tu proceso de adelgazamiento y/o de cualquier tipo de enfermedad relacionada con tu sobrepeso. Esto puede serte útil para apegarte a una dieta cotidiana y para registrar por escrito todo lo que comes. También es importante examinar tu actual estilo de vida. Identifica todo aquello que pueda representar un reto para lograr tu objetivo de adelgazar.
Paso 3: proponte objetivos realistas. Asegúrate de establecer sólo unos cuantos objetivos a corto plazo y de recompensar tus logros durante el proceso. Recuerda: los pequeños retos cotidianos pueden acarrear grandes resultados al cabo de un tiempo. Ser realista también significa esperar contratiempos ocasionales. Ten en cuenta las posibles recaídas y asegúrate de tener a la mano un plan para volver a encarrilarte y no desanimarte.
Paso 4: busca información y apoyo. Ubica familiares y amigos que puedan apoyarte en tu objetivo de adelgazar. Contar con un refuerzo positivo y con un leal equipo de apoyo puede fortalecer tu motivación y ayudarte enormemente durante tu proceso de adelgazamiento. Asimismo, te ofrecemos una excelente fuente de información en nuestro blog del plan nutricional DASH. Al usarlo, ni siquiera necesitarás contar calorías o puntos. Sólo debes concentrarte en consumir más frutas, verduras y granos enteros; buscar productos lácteos bajos en grasa; limitar la ingesta de grasas saturadas y colesterol; reducir la sal y el azúcar; adoptar una dieta mayoritariamente vegetariana, limitar el consumo de carne; y remplazar el jugo y las sodas por agua.
Paso 5: monitorea tu progreso. Revisa los objetivos que tú misma te propusiste y evalúa regularmente tu progreso. Si alcanzas de manera consistente un objetivo particular, añade otro para apegarte más aún a tu camino hacia el éxito.
Al dar un paso cada día y al utilizar los apoyos disponibles, estarás en vías de adelgazar de manera saludable y exitosa. No dejes de desafiarte a ti misma. Apégate a tu compromiso y haz de éste tu nuevo estilo de vida. Asimismo, asegúrate de consultar a tu médico para obtener consejos y sugerencias a tu medida.