Cómo lidiar mejor con las alergias a los alimentos

[avatar user=”dponieman” size=”thumbnail” align=”left” link=”https://somoscc.wpengine.com/who-we-are/diego-a-ponieman”]por Diego Ponieman M.D., M.P.H.[/avatar]

Las alergias a los alimentos ya forman parte de nuestro mundo actual. De hecho, la agencia encargada de la Investigación y Educación sobre Alergias Alimenticias (FARE, por sus siglas en inglés) reportó que más de 32 millones de estadounidenses son alérgicos a algún tipo de alimento, al igual que uno de cada trece niños. Lamentablemente, esta cifra no hace más que aumentar.

Las alergias a los alimentos pueden derivarse de todo tipo de comidas. Los ocho alergénicos alimenticios más comunes son: leche, huevo, pescado, crustáceos (mariscos con caparazón), nueces, cacahuate o maní, trigo y soja.

Las alergias pueden presentarse de distintas maneras en todo tipo de alimentos, pero las reacciones alérgicas también pueden variar en una amplia gama de magnitudes. En una reacción liviana, las alergias solo se manifiestan a través de cierta comezón y una sensación de malestar. Pero, los síntomas de las alergias alimenticias también pueden ser muy graves. La FARE reporta que cada tres minutos alguien llega a las salas de emergencia a causa de una alergia alimenticia. Para evitar estas situaciones riesgosas, a continuación, te presentamos algunos consejos para asegurarte de que te mantengas saludable y a salvo:

  • Lee las etiquetas de los alimentos procesados: las investigaciones muestran que los consumidores preocupados de los alergénicos alimenticios suelen malinterpretar las etiquetas de los alimentos con respecto a alguna exposición alergénica, sobre todo cuando leen en dichas etiquetas “manufacturado en equipos donde se procesan distintos alimentos” o “podría contener”. Si un alimento procesado “podría contener” un ingrediente que te produce alergia, es preferible que escojas uno diferente.
  • Aleja cualquier posible exposición secundaria: asegúrate de lavar bien cualquier artículo que haya estado en contacto con un alimento alergénico. Los residuos de los alimentos alergénicos también son capaces de causar algún tipo de reacción.
  • Considera optar por alimentos alternativos: hay muchas alternativas para los alimentos alergénicos más comunes (leche, huevo y trigo). En lugar de arriesgarte a padecer una reacción alérgica al usar esos ingredientes, busca otras alternativas en el supermercado de tu localidad.
  • Revisa la Guía de Alimentos Alergénicos: esta guía es una útil herramienta para evitar exponerte a ti y a tu familia a las alergias alimenticias. Contiene consejos y sugerencias para comer sin ningún riesgo.
  • Lleva contigo dos dosis de tu medicamento: si tu médico ya te prescribió alguna medicina en caso de emergencia, siempre lleva contigo varias dosis.
  • Prepara un Plan de emergencia en caso de anafilaxia: para las alergias que ponen en riesgo la vida, asegúrate de tener siempre a la mano a alguien que sea capaz de ejecutar tu plan, como la manera en que debe usar el EpiPen (inyector de epinefrina) y en qué momento debe llamar al 911.

El consejo más importante que debe recordar una persona con alergias alimenticias es estar siempre alerta y preparada para la emergencia. Prepárate para aprender a leer las etiquetas de los alimentos procesados, elabora un plan para evitar exponerte a los alimentos alergénicos, y, más importante aún, asegúrate de tener un plan en caso de emergencia.

Y si te preocupa la posibilidad de que puedas desarrollar una nueva alergia, consulta a tu médico para determinar el mejor plan de acción que te permita mantenerte saludable y a salvo.